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Toggle¿Qué es una hidrolimpiadora?
Las hidrolimpiadoras o equipos de alta presión son máquinas de limpieza de gran utilidad tanto para uso profesional como uso doméstico.
Ayudan a quitar fácilmente la suciedad incrustada en las superficies, suelos y paredes, vehículos, desatascar cañerías, limpiar la piscina, cubos de basura o mobiliario de jardín.
Con estas máquinas puedes ahorrar agua y detergente, y es posible llegar a consumir hasta 8 veces menos de agua que si usas una manguera.
Tipos de hidrolimpiadoras
Hay varios tipos de hidrolimpiadoras, se pueden clasificar por eléctricas o de gasolina, de agua caliente o de agua fría, baratas, profesionales etc…
Hidrolimpiadora con depósito de agua
Al disponer de un depósito, no se necesita una toma de agua, por lo que permite desplazarse a cualquier lugar.
Suelen tener una batería, por lo tanto, tampoco es necesario enchufarla a la corriente.
Hidrolimpiadoras de agua caliente
La mayoría pueden alcanzar temperaturas superiores a los 100 ºC. Gracias a que alcanzan altas temperaturas, se puede ahorrar en los productos de limpieza.
Perfectas para eliminar la grasa, aceites y otros componentes de las superficies.
Son la mejor opción para talleres e industrias.
Hidrolimpiadoras de agua fría
Son las más utilizadas para las viviendas, ya que la temperatura del agua no suele pasarse de los 60ºC.
Se pueden utilizar para la limpieza de fachadas, superficies en el exterior, limpiar el hormigón, vías públicas y zonas ajardinadas, etc.
Hidrolimpiadoras eléctricas
Para limpiar vehículos, cristales, superficies pintadas y cualquier suciedad que esté incrustada, son la mejor opción.
Antes de comprar este tipo de hidrolimpiadoras hay que tener en cuenta su presión y caudal. Si estas características son bajas, no se podrá utilizar de manera adecuada y se tardará más en el proceso de limpieza.
Generan menos gastos que las de gasolina y pueden succionar el agua desde cualquier fuente.
Hidrolimpiadoras de gasolina
Normalmente se utilizan cuando la electricidad no es de fácil acceso o no se dispone de ella. Son más potentes que las eléctricas y su uso va más enfocado a profesionales.
Las desventajas que tienen es que generan humo, por lo tanto, no se deben de usar en lugares cerrados, son más ruidosas que las eléctricas y su mantenimiento es más riguroso.
Componentes de las hidrolimpiadoras / Accesorios
Hoy en día se pueden encontrar multitud de variedad de accesorios, estos hacen que aumente la versatilidad en una hidrolavadora.
La mayoría de las hidrolimpiadoras incluyen:
- Pistola de alta presión. Algunos modelos incluyen un indicador de la presión o un control de la dosificación del detergente.
- Lanza pulverizadora.
- Boquillas.
- Manguera de alta presión flexible.
- Bomba. El cabezal de la bomba, que conecta la manguera con la entrada de agua, puede ser de acero, aluminio o latón.
- Motor. Puede ser eléctrico o de gasolina, refrigerado por aire o por agua.
- Ruedas.
- Algunos modelos disponen de enrollador de manguera.
- Depósito de detergente. Si no está integrado en la máquina, se puede acoplar uno externo.
- Filtro de agua para evitar que entren impurezas a la máquina.
- Kit de decapado. Es una boquilla especial con arena que, junto al agua a alta presión, ayuda a arrancar la pintura y el barniz de todo tipo de superficies.
- Cepillos rotativos. Para limpiar mejor el suelo o una superficie vertical mientras se aplica el agua.
- Mangueras limpiadoras de tuberías. Permiten desatascar las cañerías, ya que, si usas las normales para este tipo de tareas, pueden sufrir daños.
- Extensiones de manguera y lanza.
¿Qué tener en cuenta antes de escoger una hidrolimpiadora?
Lo primero es saber el uso y frecuencia que le vamos a dar y el espacio a limpiar.
Antes de decidirse por un modelo u otro, debemos tener en cuenta que:
A mayor potencia, más tiempo de funcionamiento.
Las de gasolina pueden estar más tiempo en funcionamiento. Si no se dispone de toma de electricidad ni de un generador eléctrico, se puede elegir la opción a batería, pero estas no tienen tanta potencia.
Si la suciedad es difícil de eliminar, se necesitará una mayor presión y potencia.
Según su uso, la presión también varía:
- Limpieza de bicicletas, muebles de jardín y balcones – entre 100 y 110 bares.
- Coches, paredes y suelos de exterior hasta 30m2 – de 110 a 120 bares.
- Fachadas, piscinas, tejados y suelos de exterior hasta 40m2 – de 120 a 140 bares
- Fachadas, piscinas, tejados y suelos de exterior hasta 60m2 – hasta 180 bares.
Otros factores a tener en cuenta son: la presión, el caudal y la potencia.
- Caudal: cantidad de agua que sale por la manguera.
- Longitud de la manguera: varía entre 2 y 12 metros. Conviene que la máquina disponga de recoge mangueras, para facilitar así su uso y almacenaje.
- Motor: los eléctricos requieren una toma de corriente, mientras que los de gasolina proporcionan mayor autonomía.
¿Cómo se utiliza la hidrolimpiadora?
- Si se va a usar detergente, lo primero será su carga, aunque esta dependerá del tipo de modelo de hidrolavadora.
- Conectar la hidrolimpiadora con el grifo de agua y abrir la llave de paso. La mayoría disponen de un conector para mangueras de riego.
- Hay que llenar de agua la tubería de succión y el depósito de la bomba apretando el gatillo hasta que salga el agua.
- Conecta la máquina a la red eléctrica, si fuera necesario, y presiona el gatillo.
- Regula la presión y acerca la boquilla para eliminar la suciedad.
Una vez finalizado su uso, hay que darle un tiempo de reposo al motor.
Los expertos aconsejan no excederse con el uso de agua caliente porque puede dañar algunas de las piezas de la máquina.
Mantenimiento
Es importante seguir las instrucciones de uso indicadas por cada fabricante.
Como cualquier otra máquina, se requiere de un mantenimiento periódico y anual para ayudar a prevenir y corregir posibles problemas.
- Cebar la bomba de agua antes de empezar a usarla.
- No colocar la boquilla hasta que el circuito haya expulsado el aire y empiece a soltar agua. Para ello, hay que pulsar el gatillo varias veces.
- Verificar que la toma de agua tiene la suficiente presión. De no ser así, puede introducir aire en el sistema y reducir la presión de salida.
- Limpiar la manguera antes de usarla, para evitar que penetre suciedad.
- Una vez terminado su uso, hay que vaciar el agua de la manguera antes de guardarla para que no se formen malos olores.
- Secar el dispositivo después de cada uso.
- Guardar la hidrolimpiadora en un lugar seco y alejado del sol si no se usa.
- Revisar los filtros y limpiarlos si tienen polvo y suciedad.
- Engrasar de vez en cuando las gomas de los conectores con un poco de grasa o vaselina.